
Mientras ascendían al Moncayo para intentar auxiliar a los tres excursionistas que se despeñaron en ‘La Escupidera’, coincidieron con varios experimentados montañeros zaragozanos que se estaban dando la vuelta. Con una sensación térmica de 13 bajo cero y un viento a más de 70 km/hora "no estaba el día como para subir al Moncayo".