Como el primer Rolls-Royce completamente eléctrico jamás fabricado, Spectre demuestra que la tecnología de batería eléctrica ha alcanzado la mayoría de edad y se puede implementar con éxito en la cúspide de la excelencia, el lujo y el rendimiento automotriz.
También representa un cambio tecnológico e intelectual de época para la marca: para fines de 2030, toda su cartera de productos será completamente eléctrica; Rolls-Royce nunca más producirá un nuevo modelo con motor de combustión interna.
Spectre ha creado una clase de automóvil completamente nueva: el súper coupé eléctrico de ultra lujo.
El sistema de propulsión totalmente eléctrico toma la experiencia característica de Rolls-Royce (par instantáneo, funcionamiento silencioso y la sensación de una marcha imperceptible) y la mejora para una nueva generación de clientes.
Su sistema de "Inteligencia descentralizada" permite el intercambio gratuito y directo de información entre miles de funciones individuales del vehículo, elevando aún más el célebre "paseo en alfombra mágica" de la marca. Y en su estética contemporánea pero atemporal, lleva el lenguaje de diseño de la marca y las capacidades Bespoke a una nueva era eléctrica.