A veces miro al cielo
Y todo me parece poco
Te encuentro en lo más insignificante
Como un recuerdo que se rehúsa, a morir
A veces veo mis manos, cansadas, deshechas de tanto intentar
A veces la tristeza me gana
Y la noche se me cae encima
Afuera está lloviendo
Las estrellas desaparecieron
El color perdió su color
Nunca hay respuestas
Y los tormentos son eternos
Miro al cielo de nuevo
Las lágrimas brotan
Y el corazón se entristece por tu rápida partida
A veces creo que el odio es aquello que nos hace ser humanos
Pues cada día es una lucha que no acaba
Una lucha que lastima, que toma, que asfixia
Una lucha sin sentido
Mas que tonta
La simple ilusión, de un día mas...