
El MTV Unplugged de Alice in Chains fue mucho más que un concierto: fue una despedida disfrazada de show. Layne Staley, debilitado por años de adicción, ofreció una de sus interpretaciones más crudas y emotivas frente a un público que no sabía que estaba presenciando historia. Desde “Nutshell” hasta “Rooster”, cada canción fue un testimonio del dolor, la fragilidad y la belleza que definieron a la banda. En este video analizamos todo lo que ocurrió esa noche: las velas, los errores, las risas, las lágrimas y la tensión detrás del escenario. ¿Por qué duele tanto escuchar este Unplugged hoy? Porque fue la última llama antes de que se apagara una voz única. Si alguna vez sentiste escalofríos escuchando a Layne, este video es para vos.
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